lunes, 24 de agosto de 2009

La libertad. Madre de todos, hija de la...


NO es simple tratar de explicar la sensación de libertad ke proporciona el hecho de poder hacer lo ke uno kiere en el momento ke uno kiere, sin importar cuantas normas, reglas o incluso leyes rompa uno en el acto irresponsable de ejercer nuestra libertad. Si ya se ke lo ke acabo de escribir es podría sonar a contradicción, tal y como lo son muchas de nuestras expresiones cotidianas, nuestras conductas humanas de todos los días. La brecha generacional es uno de los actos humanos kiza mas repetitivos de nuestro existir y es hasta cierto punto entendible la reacción de los adultos ante ciertas acciones de los jóvenes. Y en ambos casos, ambos grupos ejercen su derecho a la libertad, hacemos lo ke keremos, cuando keremos y como keremos sin importar ke nuestros padres se paren de pestañas o se cuelguen de la lámpara por el hecho de ke abusamos de nuestra libertad, pero en el otro lado tampoco entendemos por ke diablos nuestros hijos hacen o dejan de hacer lo ke tienen ke hacer cuando deben hacerlo y menos a veces lo ke los motiva a actuar o dejar de hacerlo de tal o cual manera.
Ah carajo! como chingaos administrar de manera eficiente la libertad de ambos lados y en ambos sentidos? Será ke simplemente no estamos diseñados para poder entender la practica de la libertad en nuestros semejantes, sobre todo si entre estos se abre una brecha tan amplia ke se ensancha con el paso de los años?

Como le hago para ke mis padres me entiendan? como le hago para ke mis hijos me entiendan? Como diablos puedo sentir ke mi libertad es completa si en cualkier extremo de la practica de esta misma me voy a llevar a alguien entre las patas?
ah ya se! simple y llanamente y en el pleno uso de mis facultades libertarias...ke esta hija de su ke barbaridad...me valga madre!

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